Trabajando En Unidad Venceremos Toda Adversidad.
RECONOCIENDO EL LUGAR DONDE ESTAMOS PARADOS.
Mateo 9:35-38. “Recorría Jesús todas las ciudades y aldeas, enseñando en las sinagogas de ellos, y predicando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia del pueblo. Y al ver a las multitudes tuvo compasión de ellas; porque estaban desamparadas y dispersas como ovejas que no tienen pastor. Entonces dijo a sus discípulos: A la verdad la mies es mucha, mas los obreros pocos. Rogad, pues, al Señor de la mies, que envíe obreros a su mies”.
Marcos 6:32-34. “Y se fueron solos en una barca a un lugar desierto. Pero muchos los vieron ir, y le reconocieron; y muchos fueron allá a pie desde las ciudades, y llegaron antes que ellos, y se juntaron a él. Y salió Jesús y vio una gran multitud, y tuvo compasión de ellos, porque eran como ovejas que no tenían pastor; y comenzó a enseñarles muchas cosas”.
Pasados de 2000 años, Jesús vino al pueblo que Representaba el Reino de Dios, que Representaba a la Iglesia, pero él no activó, no funcionó, no se movió en todo lo que los hijos de Dios hacían en esos tiempos.
Ellos hacían un montón de ritos y penitencias, costumbrismos y tradiciones que invalidaban y nulificaban la Ley de Dios (Mateo 15:2-6).
¿Qué es la Ley? La Ley eran mandamientos y estatutos de Dios, para el seguimiento del pueblo judío, ellos tenían que llevar a cabo estos para seguir siendo Luz y Luminares de este mundo. La Ley contenía también su lado sobre-entendido de juicio para los opositores y transgresores a la Voluntad y Propósito de Dios. 1 Timoteo 1:8-10.
Cuando la Ley fue dada, recordemos que Moisés esta en el monte recibiendo las tablas escritas con el mismo dedo de Dios (Éxodo 31:18-32:20). Esta Ley contenía 10 mandamientos que ya en el tiempo en que vino Jesús a caminar en esta tierra, se habían derivado en multitud de mandamientos impuestos por entendimientos y estándares humanísticos. Todo esto se empezó con una buena motivación de corazón, pero al tiempo se fue sobre-enfatizando en ello como costumbre, que se pervirtió y corrompió a causa de la mediocridad rutinaria (Mateo 15:8-9). Toda la Biblia, en su mayor porcentaje, habla del establecimiento de esta Ley, el quebrantamiento, absolución y anulamiento de ellos.
Cuando Moisés baja del monte con las tablas de la Ley, ve a la multitud que conforma el pueblo Israelita, alabando y adorando, cantando de libertad, danzando e imponiéndose las manos unos a otros, pero con malos impulsores motivacionales que los llevaban a un libertinaje, adulterando física y espiritualmente, adorando un Becerro de Oro al cual habían denominado y postulado como Jehová.
Ese mismo espíritu de engaño, camuflajeado por luz, por buenas obras de justicia, estaba vigente cuando vino el Cristo, el Hijo de Dios, Jesús. - Cuando Jesús vino a caminar por esta tierra, el pueblo, la multitud, las gentes, seguían sin tener DISCERNIMIENTO, sin tener ENTENDIMIENTO y caminando a ciegas.
Cuando Jesús vino a la tierra, recorría todas las ciudades y aldeas, enseñando y predicando el evangelio del Reino de Dios que YA se había acercado y que estaba en medio de ellos (Juan 1:9-10). Esto era un Cambio, un Emigrar o Transicionar de un lugar de entendimiento a otro.
Jesús pregonaba, proclamaba o predicaba su carácter, su luz y entendimiento en relación a la comunión con Dios y al estilo de vida del Reino.
Él no proclamaba las doctrinas, tradiciones y costumbrismos del hombre; sin embargo, él guardaba y cumplía la Ley, de tal manera que llego a vivir en un nivel donde la Ley y el Pecado no tenían fuerza condenatoria ni poder alguno sobre él, ni en contra de esas Buenas Nuevas, de ese Estilo de Vida del Reino que él manifestaba.
A pesar de todo, la gentuza que le rodeaba, se enojaba y lo repudiaba por no seguir su tradicionalismo religioso; lo querían matar, pero se detenían un poco al ver el testimonio de Dios en su vida.
Esto es muy IMPORTANTE reconocerlo: EL TESTIMONIO DE DIOS. Hay gente a tu alrededor que te odia y te quisiera borrar del mapa; todo porque no eres igual que ellos, no vives, no piensas ni sigues su activismo sistemático. Por eso te envidian, sin embargo se detienen porque hay un poder, una fuerza sobrenatural y espiritual que no permite que se te acerquen y te eliminen o te hagan mal, más allá de lo que puedes soportar. Esto es la protección de Dios sobre tu vida, es la Presencia de Dios sobre de ti, es el testimonio de Dios para contigo.
Es IMPERATIVO tener el Testimonio de Dios con nosotros. - El Testimonio vivo y efectivo de Dios en la vida del creyente no se basa en un Pasado que ya quedó atrás, ni en un Futuro incierto, solo se basa en un Presente cotidiano que día a día te dice: ¡Emmanuel! Dios está contigo, conmigo, con nosotros.
Hay muchos que viven solo de los recuerdos del pasado, y otros que tienen la esperanza en un tiempo futurístico; pero la Verdad Presente en Dios es la que Edifica y Libera.
Cuando uno va a la escuela ¿cómo se ve el Testimonio de Dios en esa vida? En las buenas calificaciones, en que tienen luz, en el entendimiento y conocimiento; que en lugar de andar copiando o usando su tumba burros, o acordeones para el examen, saben responder a las preguntas, porque entienden el asunto del medio en el cual se desenvuelven.
¿Cómo se ve el Testimonio de Dios en tu economía? Va en aumento, ya no pides prestado, ahora te extiendes hasta tener un ahorrito; cuando antes no te alcanzaba para nada, ahora empiezas a tener en abundancia y un poquito más. Ahora en lugar de que te estén dando, puedes dar en conformidad a las posibilidades y dentro del Plan y Propósito del Reino.
¿Cómo se ve el Testimonio de Dios en tu matrimonio o en tu relación sexual? ¿En tu familia, carrera, personalidad? Etcétera, etcétera…
Esto es lo que veían las gentes en Jesús: ¡El Testimonio y la Gloria de Dios! El Testimonio de Dios y Su gloria manifestada a través de su propia vida. Y era ese Testimonio glorioso de Dios en su vida lo que impedía que los envidiosos líderes farisaicos se acercaran a apresarlo antes de tiempo.
La Palabra griega para Testimonio de Dios expresado por medio o a través de tu vida, canalizado y exteriorizado a través de tu existencialismo es MARTURIA. MARTURIA es el testimonio basado y fundamentado en el poder de Dios, en uno mismo. MARTURIA. El testimonio de Dios es lo que te capacita para hacer lo que tú no puedes hacer por tus propias fuerzas y habilidades.
Cuando Moisés fue a Egipto pidiendo la liberación del pueblo hebreo, delante de faraón y los demás egipcios, arrojo su vara, y esta se convirtió en serpiente, ¿recuerdan esto? Y los magos también arrojaron sus varas, y se convirtieron en serpientes; sin embargo vemos con quien estaba el testimonio de Dios, que por Su poder la vara tuvo esa metamorfosis, ese cambio. Mientras que los otros lograron ese suceso, mediante el desarrollo de aprendizaje y habilidades.
Hay un Testimonio de Dios en la vida de sus hijos: MARTURIA. Y hay otro testimonio semejante, parecido, más no igualado; este es: MARTURION. Este testimonio es logrado por el mismo hombre, por sus fuerzas, empeño y habilidades; es producido por el humanismo y egoísmo personal. Es centrado en uno mismo y en su egocentrismo; sin embargo, MARTURIA, es el Testimonio y fruto en tu vida misma pero basado y efectuado por el Espíritu de Dios. ¡¡¡Ese es el Testimonio que queremos en nosotros!!! - Pero a la verdad: El Testimonio de Dios se basa en la OBEDIENCIA, si no hay obediencia, Dios no testifica.
Cuando Jesús estaba aquí en la tierra, él vivía en la obediencia a Dios, por lo tanto tenía el testimonio de Dios en su vida, tenía la unción (Juan 3:1-2). Y así enseñaba a las personas que le rodeaban.
Sin embargo, él vio las multitudes como ovejas sin pastor. VER tiene relación, similaridad o similitud con ENTENDER Y SABER. Jesús iba por las sinagogas (templos o lugares de congregación), calles y lugares, encontrando gentes que oraban y lloraban a gran voz en las esquinas, solo para ser vistas por los demás, gritando aleluya, gloria a Dios; miraba gentes depositando en el arca de las ofrendas las grandes sobras o limosnas que daban para Dios (y Dios no es limosnero).
Encontraba gente en las iglesias o sinagogas gritando victoria en Dios, y decretando triunfo sobre la crisis, pero viviendo derrotados y en una condición ínfima a la crisis; viviendo sin dirección ni objetividad familiar, por lo tanto, eran gente sin propósito ni destino.
Pero Jesús Vio, Entendió y Supo que aunque la gente oraba, ayunaba, decretaba victoria y grandes promesas de bendición y edificación, en realidad, estaban DESAMPARADOS Y DISPERSOS, eran como ovejas sin pastor.
DESAMPARAR: Denota a alguien que es enviado y dejado atrás, debilitado y sin fuerzas, abandonado y sin soporte base; es alguien desahuciado y sin esperanza de vida.
Jesús vio a la Iglesia, ciudades y pueblos de ese entonces, a los hijos de Dios, interesados solamente por posición social, que no le importaba ni un cacahuate su semejante, sino que eran hipócritas, egocentristas y nada de teocráticos. Eran gente que decían estar con Dios en el gran templo Judío, pero en realidad eran unos desamparados, estaban desahuciados y sin esperanza de vida.
DISPERSOS: DIASPORA: Esto es disolver, desarticular y dispersar una compañía de personas (ejemplo: desarticular una maquina). Estar abatidos o postrados. Perdida de unidad (ejemplo: Un rebaño cuando es atacado por lobos. Juan 10:12).
Eran personas que aparentaban un valor, una fuerza, una unidad, pero a la hora de “los cocolazos” cada quien se echaba a correr por su lado. Proclamaban unidad, fe y amor unos por otros, pero a la hora de la prueba quedaban postrados y abatidos, y huían despavoridos.
Esta era la condición del pueblo Israelita, de los que decían ser los hijos de Dios en ese entonces. Jesús los ve en realidad desamparados y Dispersos, entonces, ¿de que servían sus líderes o pastores farisaicos? - En Apocalipsis 1:12-13, 20, el apóstol Juan ve al Señor escudriñando a las 7 Iglesias. Ahora pregunto yo, ¿cómo nos ve el Señor en nuestra congregación o intimidad de nuestra casa? Con disposición de superación al caminar con él o con una mascara de santurrones hipócritas, que se conforman con ese incambiable estilo de vida que ellos llevan.
Jesús vio al pueblo como ovejas sin pastor. Una oveja sin pastor es fácil presa del enemigo. El pastor es aquel que trae dirección hacía pastos frescos, que les protege contra las adversidades, que les da los cuidados y mantenimiento necesarios… etcétera. Salmo 23.
“Jehová es mi pastor, nada me faltará.En lugares de delicados pastos me hará descansar; junto a aguas de reposo me pastoreará. Confortará mi alma. Me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre. Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; tu vara y tu cayado me infundirán aliento. Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores; unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando. Ciertamente, el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, y en la casa de Jehová moraré por largos días.”
Cuando este ministerio esta presente en el Cuerpo, hay una variedad alimenticia que nos provee esa multitud de vitamínicos y proteínas espirituales, que nos llevan a una expansión de entendimiento donde la cultura del Reino es proclamada a los 4 vientos.
¯ Entonces dijo a sus discípulos: A la verdad la mies es mucha, mas los obreros pocos. Rogad, pues, al Señor de la mies, que envíe obreros a su mies”.
¯ Y comenzó a enseñarles muchas cosas (Marcos 6:32-34).
Es grande la labor, es tremenda la tarea, y como aquí lo dice el Señor: Los obreros son pocos. Hay una multitud de personas que entretienen, pero pocos son los que te edifican con propósito y te llevan al destino planificado por Dios.
Por lo tanto: Rogad, pues, al Señor de la mies, que envíe obreros a su mies. –Cuando estas personas se manifiesten habra mucha enseñanza y entendimiento de esos grandes misterios ocultos hasta hoy, y gracias a eso, estaremos más facultados para vivir en “Christos”.
Que Dios nos guíe y nos ayude a ser y manifestar lo que es nuestro deber...
Centro Integral De La Familia. “DOKIME”. (Una Rama De Fundación Auto Estima).
Pastor y Colaborador: Leobardo Jaimes Duarte.